Mantener la posición de una decisión, no es tarea fácil. La mente tiene la tendencia a mantenerse en la vía en la que estuvo de forma constante. Una línea de pensamientos recurrentes que parecieran bordear la idea principal; esto se transforma en irritabilidad e inconformidad. Básicamente hablo del sentimiento de frustración. Esa negación que nos abraza, en la cual un cúmulo de contrariedades comienza a tener el papel protagónico. Es aquí donde el silencio abarca gran parte de la cotidianidad y es inverosímil lo que nos rodea. Si queremos hacer algo y trabajamos por ese algo, lo alimentamos, lo cuidamos, más luego de la nada surge un feroz monstruo como el que ven los niños en la oscuridad, el ser mas temible; el temor propio ya nada parece igual. Desde la perspectiva del miedo al fracaso, las metas se ven lejanas y se distorsiona la línea final. Mantener la idea origina; como dije anteriormente es una tarea difícil. Entonces surgen una serie de preguntas: ¿será esto lo que quiero?, ¿serán todos estos tropiezos la forma que consigue el universo para decirme que estoy por el camino equivocado?, ¿es posible que esté viviendo un error constante y que esté viendo una falsa realidad?
Lo mejor es mantenerse enfocado en el resultado final. Claro está, si analizando la situación y repasando los acontecimientos vemos que la trayectoria de esta meta ha tenido un desempeño lleno de arbitrariedades y contratiempos. Sería contraproducente mantener la idea. Lo más acertado sería cambiar el resultado hacia otra meta, no la meta misma sino lo que la rodea. Si vemos lo que queremos y creamos constantemente la realidad que vivimos; entonces es el tiempo quien dicta las leyes de esta competencia. Como ya sabemos Newton dijo en su segunda ley:
"...la variación del momento lineal de un cuerpo es directamente proporcional, a la resultante total de las fuerzas actuando sobre dicho cuerpo y se produce en la dirección que actúan las fuerzas..." Segunda Ley . Ley de Fuerza de Newton. Entonces lo mejor es mover mi meta en la línea sobre la cual estoy y esperar sencillamente su resultado final, aplicando por su puesto la fuerza respectiva...Hay que darle tiempo al tiempo.
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