Amor Amor

Amarse, amar, amarme, amor, amor. Cuantas cosas encierra esta palabra. Sentimientos hermosos, hermosos recuerdos, recuerdos imborrables de imborrables cosas, cosas que encierran un particular sabor, sabores que a veces parecen amargos o dulces, dulces recuerdos de algo que siempre será el amor de nuestra vida. Como le llamemos es amor. Se supone que esta palabra dice de por sí su propio significado amor es amor. Pero a veces insistimos en amar mas a los demás que a nosotros como un acto de amor sincero, como un acto de amor que se supone que llega mas allá de los límites del verdadero amor. Es absurdo amar tanto que dejes de amarte. El amor como tal es hermoso y colorido, sonoro y sensitivo, amable y expansivo. Cuando no sentimos que el amor nos llena de color y nos da mas brillo sino por el contrario nos entristece o nos hace daño; ya no es amor. Es algo que sencillamente estamos asociando con otra cosa. El amor solo se corresponde con el amor. El amor llena los espacios, abre los caminos, inunda la vida, dibuja las miradas, enaltece los nombres, crece cuando se siente, mueve cualquier fibra, ayuda cuando es sincero, mantiene todo en su ritmo, viaja a través del tiempo, aumenta con pequeños gestos, traspasa dimensiones, diluye cualquier duda. Todo es amor y del amor nos alimentamos. Ver el amor es verse uno mismo, aceptar el amor es aceptarse uno mismo, conjugar el amor es sentir los verbos pasando de un tiempo al otro sin tiempo ni espacio. Es en el amor que podemos avanzar es desde el amor que podemos continuar...