Nueve espejos...

Entonces tengo nueve espejos, nueve ventanas, una alma dividida en millones de hilos y un solo cuerpo!

Abro cada ventana tratando de observarme y al escucharme respirando observo los latidos de los corazones palpitando desde dentro de los espejos... 
Un sonido mudo y en silencio, un sonido de pies descalzos, un sonido disimulado pero un enorme movimiento en mi alma.
Desplegando mis recuerdos, solo observo los pasos y tratando de no dormirme tiemblo...

Es tan complicado y es tan acertado que mi mente entra en un excitado conflicto.
No es tan difícil y sin embargo es emocionante,
no es tan difícil y sin embargo es intrigante,
no es tan extraño y sin embargo es alucinante!

Despejando mis espejos, revisando los reflejos que me han estado haciendo señales con su luz incandescente, he notado con cierta emoción debo decirlo que, no todo lo que parece es cierto y no todo lo cierto tiene que existir... Una paradoja hermosa!

Guardo mis registros dentro de cajas de madera, en mi armario virtual.
Lo guardo no por inseguridad sino por vanidad.
A veces me gusta recordarme solo por hablar mal de mi, se que es una buena estrategia de voluntad.
En cada suspiro de mi pecho, solo me observo y me inquieta saberme tan frágil y aun así tan firme en mis deseos.
Hay nueve espejos que me reflejan constantemente quien soy, hay nueve mundos que se despiertan conmigo cada mañana.
Desplegando mis recuerdos, solo observo los pasos ajenos y descubro mi latente fama en los ojos de mis observadores.
Extraño?
Eres extraño?
No lo creo.... Eres ese reflejo seguro que inspira mis pensamientos!